Después de un montón de horas de retraso en el vuelo, ya estoy en Kathmandú!
Primera impresión: ambientazo!!!
Ya en el avión notas mucha vidilla… personas de muchas edades, desde muy jóvenes a bastante mayores, hasta de unos 65 – 70 años… una buena parte va a
subir montañas, van con sus forros polares, mochilas.. ¡Qué gustazo! Yo quiero ser así de mayor!! sin subir montañas, eso ya sé que no es lo mío, pero subiéndome a aviones, eso si! J
He charlado con mucha gente (en 24 horas de camino, imagina!), entre ellos un hombre de unos 50-55 años viajando sólo y que se unía a un grupo de trecking para hacer “los 7000”; una chica que iba a Tokio porque es de allí, un americano de Texas que ha trabajado en Qatar año y medio y se vuelve a USA…En fin, un montón de gente interesante!!!
El aterrizaje, espectacular! Viendo el Himalaya desde el aire… y luego Kathmandú lleno de colores… cada edificio de uno color: rosa, verde, azul… preciosa llegada!
De ahí al hotel Kathmandú Guest
House, a las 18.00, hora Nepalí, con un chico que me recogía, organizado por el
hotel que había reservado previamente (siempre cojo desde Madrid una o dos
noches de hotel para luego ya decidir cómo seguir). Yo pensaba, qué lujo, me recogen! Pues no…se
tarda mucho más que salir tú sola y coger un taxi por tu cuenta… bueno, y
además que esa es mi debilidad, lo de ir improvisando y decidiendo, que me hace
sentir libre en cada momento y es con lo que me encuentro en máxima
tranquilidad… :-) Después, charlando con el chico, me ha pasado una cosa muy graciosa, le he dicho que estaría una noche sólo porque lo veía caro, y entonces me ha ofrecido el de
su tío J El
que he cogido es muy bonito por fuera, y emblemático en la ciudad… pero la
habitación es un poquito así así, con calidad precio poco ajustado… así que
mañana me cambio! Ya veremos si acabo en el del “tío” o dónde.
A las 19.15 me he lanzado a cenar por
ahí y he preguntado la hora adecuada de “recogerse”. Me han dicho que sobre las 20.00...
Bueno, pues me han dado casi las 22.00! pero he visto que no es nada peligroso,
hay muchísimo ambiente en las calles, incluso se oye música en muchos sitios…
de hecho ahora debe haber fiestecilla o algo en mi hotel porque la tienen a
tope!
El restaurante al que he ido, Yanglin,
que he encontrado paseando en busca de comida nepalí, me ha gustado muchísimo.
He tomado lo más típico de aquí, momos. He elegido de pollo (iré cambiando porque hay de verdura,
carne…). Estaba buenísimo! Picante y sabrosísimo.
Cuando estaba esperando el plato,
me pregunta el camarero si se puede sentar en mi mesa una pareja (porque estaba
lleno y esto debe ser la costumbre). Bueno, pues majísimos!! De Londres, Dan y
Cat, que hemos conversado durante más de 1 hora. Ellos se van a subir parte del
Everest… nada menos… y se miraban muy bonito, por cierto J
Así que un día largo de aviones y
distancias, pero muy muy interesante!!
Mañana voy por la mañana a
visitar la sede de Madre Teresa, que tengo muchas ganas, para organizar los
próximos días con una combinación de voluntariado y paseítos. Ya me han confirmado
que están aquí, igual que en tantos lugares del mundo, haciendo una labor
impresionante. En fin, esto no ha hecho más que empezar!!!
¿Alguna sugerencia, idea, consejo?
Jo María que viajazo!!!!!! Pues que lo disfrutes!!!!!
ResponderEliminarUn beso
Que disfrutes todo lo que puedas y que no dejes de contarnos todo, día tras día. Eres un ejemplo.
ResponderEliminarQue viaje tan bonito! Y solo acaba de empezar! Gracias Maria por compartirlo con todos los que leemos tu blog!! Un besazo desde madrid!!
ResponderEliminarBea.
Sugerencia? idea? Que nos sigas contando por favor, suena todo GUAY! Muchos besos!
ResponderEliminarMadre mía María, el otro día vi algo sobre esto en tu muro de Facebook, me dije "otra locura de María" y no le presté más atención. Pero después de unos días, Madonna, claro que hay que prestarle atención, ¡y mucha! ¡Gracias por vivir María, gracias por hacerlo así y gracias por contarlo y compartirlo!
ResponderEliminar